Historias Cotidianas (22 de Junio del 2009)

La nota que había encontrado encima de la mesa del salón, ahora no era mas que una bola de papel tirada en el rincón mas lejano de la casa. Tenía ahora entre las manos los cristales del espejo del baño, la sangre corria por las palmas de sus manos desde los nudillos y manchaban el resto de pedazos de espejo que habia en el lavamanos. Solamente habían quedado algunos trozos de espejo en el lugar que habían ocupado siempre, en ellos podia ver su propia imagen recortada. En el reflejo podia ver uno de sus ojos, enrojecido y arrasado por lágrimas. Hubiese querido meter el rostro entre aquellos restos de espejos y destrozar la imagen de él mismo. Le hubiese gustado poder cambiar,ser otra persona, arrancarse el dolor que le había traído un vulgar trozo de papel, reiniciar una historia desde algún punto intermedio. Cerró los puños y los cristales penetraron por la piel hasta cortarle...