Historias Cotidianas (19 de Junio del 2009)

No le hacian demasiada gracia las vacaciones de playa, siempre le habian recordado a los tiempos infantiles de "Verano azul", eran para él algo tan decadente. Pero en aquellos momentos de su vida, sabia que debia cumplir en parte con los deseos de su esposa, por ello doblaba la rodilla y se dejaba llevar hasta aquellos lugares. La única condición era no verse arrastrado hasta el tostadero comunitario, preferia dejar que su mujer se acercase al punto de ebullición bajo el sol, mientras él encontraba la paz en la galeria del apartamento. Le habia cogido el gusto a aquellas mañanas sentado a la sombra, con algún buen cocktail cerca y un buen puro habano al alcance, dejando pasar las horas mientras leía todo aquello que durante el año le era imposible leer. Encontraba su epacio dentro de aquel infernal lugar de aquella manera y se parecia bastante a la felicidad...