domingo, 13 de diciembre de 2009

Historias cotidianas (11 de diciembre del 2009)

La lluvia barría la carretera furiosamente y en el interior del coche el sonido de la lluvia sobre la carrocería asemejaba a un concierto de percusión de ritmo salvaje. El limpiaparabrisas apenas daba abasto para permitirle ver lo que había delante, avanzar se le hacia una carga farragosa por la condiciones y por las pocas ganas que tenia de emprender aquel viaje. Parecía que el mismo universo se hubiese aliado con él para detener aquel trayecto, aquel viaje hacia un destino no deseado, en una compañía que hora tras hora se le hacía más indeseable…

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